Texto por: Roberto Araque.
Sitio del autor, aquí.
El
gordo Martín no se marchó y, al igual que Gutiérrez antes de la pelea, le
aconsejó:
-
Le tiras y corre, no dejes que te agarré. Si se mama primero que tú puede que
tengas un chance.-
-
Le tiro y corro.-Afirmó, inseguro de la estrategia. Juan era fuerza bruta,
tenía un historial extenso. Su última víctima; el chico de 6to, ni se le
acerca, algunos decían que se orinó en los pantalones después de que Juan le reventó
la nariz a puñetazos, ycuando se cayó, Juan lo pateó hasta el cansancio,
también que el de 6to y que lloró, y hasta fue a la dirección a denunciarlo,
pero se arrepintió luego de que Juan le mostrara el puño. Todas esas historias
salieron a la luz después, y sólo después, de que él lo llamara “Güevon” frente
a la mitad de la escuela y todos se burlaran del que sería su verdugo. Saltó
Jesús leal, uno de la Sección “B” que, aun conociendo el historial de su
compañero de aula, le apostaba al valiente y le entregó dos piedras. Dijo:
-
Aprieta los puños.- Él los apretó. Jesús lo miró y agregó:
-
¿Ves? ¿Notas la diferencia?-
-
Si aprietas las piedras tendrás más fuerza, pero no las sueltes. Y no digas que
te las di yo.-
De allí que salió el enano Antonio y agregó:
-
Mejor le das en las bolas. – Una jugada sucia, la peor de todas, pero válida.
También estaba agarrar un tubo o palo o lo que sea. Entonces fue a buscar un tubo, encontró uno
de plástico en uno de los baños. Práctico los golpes y las formas en la que lo
usaría – al estilo ninja que vio en una película-. De regreso lo esperaba el
grupo que lo apoyaba, todos bajo el yugo del tirano que llamabanJuan.
-
Has lo que te digo, si se mama primero tienes un chance. Lo vi en una película.-
-
¿En cuál? Mentiroso.- Preguntó Antonio.
-
En la de un boxeador; el ruso le dio y le dio, después, cuando estaba cansado,
el otro le cayó y cuando lo iba a rematar se paró porque no era malo. –
Entonces el tema de conversación no sería la estrategia a seguir, sino la
batalla campal, y ficticia, entre dos boxeadoresen una película de los 90 pero
que la televisión aún transmitía una y otra vez. Él se apartó del grupo y buscó
el lugar en donde se realizaría la batalla, esperaría a Juan sobre un
terroncito de tierra ya que había leído en un libro de historia que los
ejércitos siempre buscaban una posición favorable en el terreno. Entonces él examinó
todos los lugares y, después de evaluar todas las posibilidades, se decantó
poruno “alto” que le permitía llegar al rostro de Juan; si lograba que se
acercara, él con un brinquito y empuñando fuertemente las piedras, podía
asentarle un golpe y hasta tumbarlo. Pero no se confió, si ese plan fallaba y
no lo tumbaba estaba una zanja que estaba cerca; podía agarrar un poquito de
charco y empatucarle la cara, entonces quedaría ciego y él podría caerle a piña
hasta que pidiera perdón. Y si eso fallaba, estaba el tubito de plástico para
defenderse como el ninja que vio en televisión. El último recurso, el botón de
emergencia, sería patearle las bolas y correr. No había más nada qué hacer,
limpió el terreno para que Juan no tuviese oportunidad de tomar una piedra o lo
que fuese, ya con su tamaño tenía suficiente ventaja y si llegaba a agarrar un
palo o una piedra sería su fin. La batalla se planteaba similar a la de David
contra Goliat, sólo que por alguna razón ya Dios no se metía en los asuntos de
los hombres y menos en el de las escuelas primarias. Después de ordenar sus
ideas y llenarse de valor, se le apareció Jesús y le dijo:
-
Ya sabes cómo es, uno contra uno y nadie se mete. Si alguien se mete, nos
metemos nosotros a ayudarte.-
Existían un cúmulo de leyes no escritas y
respetadas, algunos dicen que en las peleas callejeras se vale todo y no
siempre es así. Él estaba dispuesto a quebrar algunas de ellas, al fin y al
cabo Juan era mucho más grande que él.Anduvieron hablando y escuchó varios
consejos, al medio día ya todo estaba listo, lo que se debía hacer se hizo, y
sin embargo, se encaminaba directo al Iceberg a máxima velocidad.
Texto por: Roberto Araque.
Sitio del autor, aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario