Texto por: Fernando Chelle
Sitio del autor, aquí.
Selección poética
del libro
Poesía de los
pájaros pintados
Casualidad
Mujeres altas
faunos de mi existencia.
El vértigo ha vuelto a apuñalarme,
ayer salieron de un recuerdo de Artaud,
recuerdo de una escoria,
hoy vienen con esta lluvia de jueves,
lluvia germinal,
altura de precipicio
de verticalidad
de erección infinita
de perspectiva que dirime
el extrañamiento
del salto.
Caeré
en tu pecho
Caería
como una manzana
fundido
por tu dulzura,
presipitándome
ante tu carne morena,
así
podría beber de tus ojos de gata
y
arrebatarte tus labios de sangre.
Caería
como Adán ante Eva
en
el cascabel de un nido de serpientes
y
junto a ti, sublime
contra
todo lo esperado
lograría
despojarte de tus perennes hojas.
¡Oh
mujer de mis delirios!
mi
débil carne gime por ti
y
siento que la sangre que me habita
late
en tu pecho
como
en su nido.
Credo
poético
Creo
en la flor de la tarde
agitada
como abanico de sangre
caída
a tus pies de ninfa.
Creo
en el ave de hierro
dejando
caer sus plumas
como
cuchillos de sombra.
Estoy
seguro de la seguridad
de
los volantes, de los dados
y
de tu vientre de niña.
Me
he convencido de la caída
y
de la ascensión, pero mi grito
quisiera
apuñalar
la
ley de gravedad.
Trampos
Será mañana este hoy
que está sujeto,
hundido en el letargo de la quietud.
Pero el reflejo viene desde un solo lugar.
Huir de los espejos
de las caídas narcisistas.
Solo el sol me llama
el vidrio extiende su filo.
Caen mis pedazos
después de viajar sin asideros
sin transitados muelles.
Suena el acordeón del Mingo
al solcito de Poulliér.
Texto por: Fernando Chelle
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